Guía para revender hosting web y crear tu propio negocio digital
¿Qué es un revendedor Cloud?
Un revendedor cloud (o cloud reseller) es una persona o empresa que ofrece servicios en la nube a sus propios clientes, sin necesidad de operar la infraestructura directamente. En lugar de construir y mantener servidores propios, el revendedor utiliza recursos de un proveedor mayorista (como almacenamiento, hosting, correo, servidores, etc.) y los ofrece bajo su propia marca. Este modelo permite iniciar un negocio digital rentable, escalable y con bajo costo inicial.
Como funciona un plan de revendedor de hosting
Iniciar un negocio como revendedor de hosting o soluciones cloud es una de las formas más inteligentes de emprender en el mundo digital actual. Ya sea que seas diseñador, desarrollador, agencia o emprendedor digital, este modelo te permite generar ingresos recurrentes con baja inversión y alta escalabilidad.
Funciona así: tú adquieres un plan mayorista de hosting con ciertos recursos (espacio, ancho de banda, cuentas, etc.) y los divides en paquetes más pequeños que luego vendes a tus propios clientes.
¿Qué incluye un plan reseller?
- Espacio en disco (por ejemplo, 50 GB o 100 GB)
- Transferencia mensual (ancho de banda para los sitios)
- Número de cuentas de hosting que puedes crear
- Panel de administración WHM para gestionar todos tus clientes
- Panel cPanel para tus clientes
- Certificados SSL gratuitos
- Cuentas de correo personalizadas
- Soporte técnico del proveedor
- Opción de marca blanca (todo personalizado con tu logo y nombre)
Tipos de clientes a los que puedes vender
Freelancers y profesionales independientes
Diseñadores, desarrolladores, redactores, consultores, coaches, fotógrafos… todos ellos necesitan una presencia web profesional, y prefieren soluciones prácticas, económicas y con atención personalizada.
Ofrece:
Planes básicos de hosting + correo profesional + dominio personalizado.
Tiendas online y pequeños negocios
Pequeños comercios, marcas de productos o servicios locales buscan posicionarse online con tiendas propias o sitios corporativos. Necesitan estabilidad, seguridad y soporte confiable.
Ofrece:
Planes con mayor almacenamiento, certificados SSL, cuentas de correo, backups y soporte rápido.
Pymes y empresas consolidadas
Este tipo de cliente requiere soluciones más robustas, correos empresariales y una gestión ordenada de su presencia digital. Suelen valorar mucho el soporte personalizado y la confianza en su proveedor.
Ofrece:
Hosting avanzado, Google Workspace, dominios, mantenimiento web y atención prioritaria.
Agencias de diseño, marketing o desarrollo web
Diseñadores, desarrolladores, redactores, consultores, coaches, fotógrafos… todos ellos necesitan una presencia web profesional, y prefieren soluciones prácticas, económicas y con atención personalizada.
Ofrece:
Planes básicos de hosting + correo profesional + dominio personalizado.
Proyectos educativos, ONGs o comunidades
Pequeños comercios, marcas de productos o servicios locales buscan posicionarse online con tiendas propias o sitios corporativos. Necesitan estabilidad, seguridad y soporte confiable.
Ofrece:
Planes con mayor almacenamiento, certificados SSL, cuentas de correo, backups y soporte rápido.
Emprendedores digitales y creadores de contenido
Desde influencers hasta creadores de cursos o miembros de una comunidad online, este perfil busca tener una plataforma propia que les dé independencia.
Ofrece:
Hosting optimizado para WordPress, velocidad, escalabilidad, formularios, seguridad y correo empresarial.
Características que debe tener un buen hosting para revender
Panel de control para revendedores (WHM) y clientes (cPanel)
- WHM (Web Host Manager): para que puedas crear, administrar y personalizar cuentas de hosting.
- cPanel: para que cada cliente gestione fácilmente su sitio, correos, bases de datos, archivos y más.
Recursos suficientes y escalables
- Espacio en disco generoso (SSD o NVMe idealmente)
- Transferencia mensual amplia
- Número flexible de cuentas de hosting
- Además, debe ser escalable: cuando crezcas, que puedas cambiar de plan sin migrar todo desde cero.
Marca blanca total
- Panel sin logos del proveedor
- Correo con tu marca
- DNS personalizados
- Comunicaciones automatizadas con tu identidad
Alta disponibilidad y rendimiento
- Uptime superior al 99.9 %
- Servidores optimizados
- Tecnología actualizada (LiteSpeed, CloudLinux, etc.)
- Centros de datos certificados
Seguridad robusta y certificados SSL gratuitos
- Certificados SSL gratuitos
- Firewalls y escaneo antimalware
- Protección contra ataques DDoS
- Backups automáticos
Soporte técnico profesional y en tu idioma
- Soporte 24/7 por ticket, chat o teléfono
- Respuestas claras y rápidas
- En español (o tu idioma local)
- Personal capacitado, no solo bots
Errores comunes y cómo evitarlos
Elegir al proveedor solo por precio
“Encontré uno muy barato, así que me lancé…”
Un proveedor económico no siempre es el más rentable si no ofrece estabilidad, soporte técnico o herramientas completas. Cuando falla, tus clientes te culparán a ti, no al proveedor.
Cómo evitarlo:
- Evalúa reseñas y reputación.
- Verifica si ofrece soporte 24/7 y en tu idioma.
- Asegúrate de que tenga infraestructura sólida, marca blanca y herramientas profesionales.
No tener un nicho o cliente objetivo claro
“Le vendo a quien sea, mientras me pague…”
Intentar vender a todos es como no venderle a nadie. Si no conoces a tu cliente ideal, no podrás diseñar planes ni estrategias efectivas.
Cómo evitarlo:
- Evalúa reseñas y reputación.
- Verifica si ofrece soporte 24/7 y en tu idioma.
- Asegúrate de que tenga infraestructura sólida, marca blanca y herramientas profesionales.
No ofrecer soporte (o depender 100% del proveedor)
“Yo revendo, que el proveedor atienda…”
Aunque el proveedor tenga soporte, tú eres el primer punto de contacto para tus clientes. Si no respondes a tiempo o no sabes cómo ayudar, perderás confianza y clientes.
Cómo evitarlo:
- Establece horarios y canales de atención claros.
- Aprende lo básico para ayudar de inmediato (emails, accesos, dominios).
- Usa un proveedor con soporte que te respalde en segundo plano.
No personalizar tu marca y parecer “uno más”
“No tengo tiempo para ponerle logo o colores, así está bien…”
No tener una identidad visual profesional genera desconfianza. Tus clientes no sabrán si trabajan contigo o con “una empresa más del montón”.
Cómo evitarlo:
- Usa marca blanca: paneles, correos, URLs personalizadas.
- Diseña un sitio web con tu logo, colores y nombre comercial.
- Ofrece una experiencia de usuario clara, moderna y coherente.
